....:::: Recuerdos Espejismos ::::.... - By SkY LighT
Las luces comenzaron a atenuar y ya no quedaba nada en que pensar, todo había terminado al fin.
Hacía tiempo que no se movía de aquel lugar solitario, haciendo girar su mente en un recuerdo muerto hace ya tantos siglos. Aun lo extrañaba cuando la oscuridad fue total, cuando delante no podía divisarce ni la mas minuscula gota de luz. Todo era nuevo, invadida por la oscuridad, pero sus ojos se negaban a cerrarce. Tal vez, volvería a confiar en su instinto, aquel que la llevo al placer y a la agonía, en forma tan simultanea como inevitable.
Sus ojos agitados se entrecerraron un instante... fue alli que vio por primera vez, dentro de este nuevo universo que la envolvía. No encontro luces, mucho menos sombras, solo armonía, no era mas que un espejo. Un universo vacío y un espejo.
Su reflejo era una copia intacta, pero ella sentía algo detrás, y al voltear, no había nada alli. Solo el reflejo lo delataba, allí parado, observando, sin hacer nada.
Ella posó su mano sobre el cristal y sintió el calor, pero el dolor fue mayor. A cada caricia que a ese espejo ella regalaba, él desaparecía. Así fue durante años.
La joven sabía que muy pronto dejaría de existir y solo anhelaba verlo una vez mas, la última vez antes de que su reflejo se desvaneciera por completo. Él seguía sin presentarce.
Muchas figuras se reflejaron en aquel espejo, pero nunca él. Y ella adoró a cada una, pero a ninguna amó realmente. Siempre amaría a aquel reflejo de un desconocido que jamas conocería, y lo amaría solo por su mirada, por todo lo que en ella se dibujaba.
Lentamente se cansó de esperar, entonces su reflejo y su respiración comenzaron a desaparecer. Con su ultimo vestigio de aliento, levantó la mirada hacía aquel espejo esperando ver una vez mas a aquel desconocido, y esta vez alli estaba, arrodillado a su lado, sosteniendola y sonriendole en un gesto de armoniosa paz, acariciandola lentamente.
Y lentamente, ella se durmió.
Hacía tiempo que no se movía de aquel lugar solitario, haciendo girar su mente en un recuerdo muerto hace ya tantos siglos. Aun lo extrañaba cuando la oscuridad fue total, cuando delante no podía divisarce ni la mas minuscula gota de luz. Todo era nuevo, invadida por la oscuridad, pero sus ojos se negaban a cerrarce. Tal vez, volvería a confiar en su instinto, aquel que la llevo al placer y a la agonía, en forma tan simultanea como inevitable.
Sus ojos agitados se entrecerraron un instante... fue alli que vio por primera vez, dentro de este nuevo universo que la envolvía. No encontro luces, mucho menos sombras, solo armonía, no era mas que un espejo. Un universo vacío y un espejo.
Su reflejo era una copia intacta, pero ella sentía algo detrás, y al voltear, no había nada alli. Solo el reflejo lo delataba, allí parado, observando, sin hacer nada.
Ella posó su mano sobre el cristal y sintió el calor, pero el dolor fue mayor. A cada caricia que a ese espejo ella regalaba, él desaparecía. Así fue durante años.
La joven sabía que muy pronto dejaría de existir y solo anhelaba verlo una vez mas, la última vez antes de que su reflejo se desvaneciera por completo. Él seguía sin presentarce.
Muchas figuras se reflejaron en aquel espejo, pero nunca él. Y ella adoró a cada una, pero a ninguna amó realmente. Siempre amaría a aquel reflejo de un desconocido que jamas conocería, y lo amaría solo por su mirada, por todo lo que en ella se dibujaba.
Lentamente se cansó de esperar, entonces su reflejo y su respiración comenzaron a desaparecer. Con su ultimo vestigio de aliento, levantó la mirada hacía aquel espejo esperando ver una vez mas a aquel desconocido, y esta vez alli estaba, arrodillado a su lado, sosteniendola y sonriendole en un gesto de armoniosa paz, acariciandola lentamente.
Y lentamente, ella se durmió.
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